Desde pequeña mi padre me inculcó la idea de tener un negocio propio. Crecí, pues, con esa idea fija y, por tanto, debía prepararme para hacerla realidad.
Al concluir la secundaria seguí la carrera de Administración de Negocios. Paralelo a ello también estudiaba Diseño de Calzado y después ingresé en Diseño de Moda. Luego de un año de trabajo en mi carrera decidí dedicarme al negocio de confección de ropa; es así que saqué una línea de leggins en algodón con diseño cuero napa. Al notar que teníamos un sobrante, decidí diseñar unas pequeñas carteras tipo “sobre”. Como eran fabricadas en cuero y los diseños fueron novedosos, con mucha facilidad vendí las primeras 4 unidades que confeccioné. Sentí mucha alegría y sentí también que eso era lo mío. Infinidad de ideas pasaban por mi mente para seguir creando nuevos diseños y trabajar con 100% cuero genuino, que –dicho sea de paso- tiene una infinidad de colores, texturas y diseños.
Como la mayoría de mujeres, siempre fui una apasionada de la moda, desde pequeña, así que puse manos a la obra y empecé a confeccionar Bolsos y Carteras.
Por aquellos años invertí 60 soles para comprar de 3 a 4 pies de cuero y habilité un pequeño espacio en mi casa para trabajar. Como todo inicio, el mío no fue fácil pues solo tenía una máquina que –felizmente- me regaló mi padre y que tuve que adaptarla para trabajar en cuero; tampoco tenía las herramientas necesarias; pero así pude sacar mi primera colección de carteras de mano. Si bien todo en esta vida tiene dificultades, me sentí muy deprimida cuando fui estafada en mi primera colección. Me causó mucha tristeza porque fueron muchas noches de trabajo; sin embargo, pude superar ese mal momento y no me dejé vencer por el desánimo. Tenía que salir adelante. Creo que es así como pensamos y actuamos los emprendedores. Así que presté un dinerito e invertí 50 soles para seguir trabajando en monederos. Tenía la convicción de realizar un trabajo bien hecho, con material de primera calidad y con diseños novedosos. Así, mi pequeño negocio fue creciendo poco a poco y con mucho sacrificio invertía todo lo que ganaba.
Hace 5 años decidí crear mi marca RASCHBEL, patentada, 100% cuero genuino. Soy la diseñadora de cada uno de mis modelos y me gusta trabajar con diferentes texturas y diseños. Definitivamente, trabajar con cuero te da la garantía de un Bolso duradero, y eso lo saben nuestros clientes. Vale, entonces, todo el esfuerzo que le ponemos a cada uno de nuestros trabajos. En la mayoría de veces yo soy quien asesora a todas mis clientes; es que cada una de nosotras tenemos un estilo diferente de cómo nos gustaría llevar un Bolso o una Cartera.
Para quienes ya tienen o van a empezar un nuevo negocio debo insistir que el éxito solo se logra trabajando con esfuerzo, dedicación, mucho amor y manteniendo siempre la calidad del producto, para continuar logrando la aceptación del público. Nosotros así lo hacemos.
Somos Bolsos RASCHBEL 100% cuero; una marca trujillana que con calidad y creatividad continúa creciendo; tal es así que actualmente ya hacemos envíos a Nivel Nacional.